Esperemos que tarden en ventilarse esas habitaciones, que se demore el día en el que tan sólo sean recuerdos muertos bajo una colcha.
Mientras tanto, será mejor saborear la sangre cálida, la piel suave, el olor de los cabellos y la densidad de tus labios, tan pasajeros que ahora parecen eternos.
Que decidido.
ResponderEliminarEsperemos que tarden en ventilarse esas habitaciones, que se demore el día en el que tan sólo sean recuerdos muertos bajo una colcha.
ResponderEliminarMientras tanto, será mejor saborear la sangre cálida, la piel suave, el olor de los cabellos y la densidad de tus labios, tan pasajeros que ahora parecen eternos.
Saludos.